Los jugadores de Quilmes y Gimnasia de Mendoza se preparaban para afrontar el segundo tiempo del partido por el Reducido de la Primera Nacional en busca del ascenso, hasta que un escándalo se desató en el estadio del Cervecero. Una situación que llevó a que el partido fuera suspendido por decisión del árbitro.

Un petardo que explotó cerca del arquero de Gimnasia y Esgrima de Mendoza, Brian Olivera, lo dejó aturdido, lo que provocó la suspensión del partido que sostenía con Quilmes, por la primera fase por el segundo ascenso. “No se puede recuperar, está aturdido”, reconoció el árbitro José Carreras en TyC Sports.

Pero no fue solo eso. Cuando retiraban al arquero en camilla rumbo al vestuario, otros simpatizantes también le arrojaron proyectiles.

Cómo fue la agresión al arquero de Gimnasia de Mendoza

“Paso el informe de lo ocurrido y lo que sucederá de aquí en más lo resolverá el Tribunal de Disciplina”, agregó el árbitro luego de esperar un tiempo prudencial para que el arquero se recuperara. Como eso no ocurrió y Olivera debió retirarse del campo de juego en camilla, se procedió a suspender el partido.