El informe generó un fuerte cimbronazo no sólo en el Reino Unido sino entre las principales potencias Occidentales. En las últimas horas el Comité de Inteligencia y Seguridad de la Cámara de los Comunes publicó un informe donde detalla el plan de China para infiltrar a sus espías en áreas estratégicas y critica la liviandad de los distintos gobiernos para anteponer los intereses económicos.

“El aparato de inteligencia estatal de China, casi con certeza el más grande del mundo con cientos de miles de oficiales de inteligencia civil, tiene como objetivo al Reino Unido y sus intereses de manera prolífica y agresiva, y presenta un desafío”, resalta el informe publicado ayer y que se realizó en base a distintas investigaciones junto a distintos comités del parlamento británico.

El documento identificó las distintas herramientas que utilizó el Partido Comunista chino para insertarse en las principales esferas de poder del Reino Unido, inclusive en las agencias de inteligencia británicas. Esta misma estrategia, según advirtió el informe, podría estar siendo utilizada en otros países Occidentales.

Además, el informe exhibe un fuerte tono crítico hacia los sucesivos gobiernos británicos que en cierto sentido colaboraron a la inserción de la inteligencia china al no abordar las amenazas existentes porque los intereses económicos tenían prioridad. Tal como sucedió en gran parte del mundo, el gigante asiático amplió exponencialmente sus negocios y el comercio con el Reino Unido.

Este desequilibrio entre el interés económico y la seguridad nacional hizo que, según entendió el Comité de Inteligencia, China se convierta en una de las principales amenazas para la seguridad británica y coloca al país “justo por debajo de los principales objetivos prioritarios” de Beijing.

Los detalles de la estrategia de China

Entre los ejemplos concretos, el texto reveló que la inversión de China en el sector nuclear ponía en riesgo el control de la electricidad por parte del Reino Unido. En otras palabras, advierten que, si la relación entre ambos países se deterioraba, China podría tener como objetivo quedarse con el control total de este sistema.

Además, expresa la inquietud sobre la influencia china en las universidades británicas, que se han convertido en “caldo de cultivo” para que el gigante asiático pueda expandir su influencia cultural entre profesores y alumnos.

El actual primer ministro Rishi Sunak buscó desligarse del documento y dijo que el comité tomó la mayor parte de la evidencia en 2020 y que desde entonces se han fortalecido las políticas para evitar la penetración china en sectores estratégicos del Reino Unido.

El Comité de Inteligencia y Seguridad de la Cámara de los Comunes es el encargado de supervisar a las agencias de inteligencia MI5, MI6 y el GCHQ, y demoró unos cuatro años en confeccionar este informe de 207 páginas que alerta por el interés de china por colar a sus espías en las redes de inteligencia occidentales.