Esta es una de las matanzas de civiles más graves desde la invasión rusa, al menos 51 personas, incluido un niño, murieron en un bombardeo en un pequeño pueblo de la región de Járkov, en el este de Ucrania. Las víctimas asistían a un velorio, según informaron este jueves las autoridades ucranianas.

El ministro ucraniano del Interior, Igor Klymenko, dijo que las víctimas se habían reunido para asistir a una ceremonia en honor a un vecino fallecido, en Groza, un pueblo de 330 habitantes. Groza se encuentra cerca de la ciudad de Kupiansk, próximo a la línea del frente de combate.

El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, actualmente en España para una reunión de dirigentes europeos, denunció “un crimen ruso manifiestamente brutal”.

En tanto, la coordinadora humanitaria de la ONU para Ucrania, Denise Brown, se declaró “horrorizada” por el bombardeo.

Una mujer observa los cuerpos de civiles muertos en un bombardeo ruso en el este de Ucrania (Foto: AFP)

“Las imágenes provenientes de este pueblo, en donde viven un poco más de 300 personas, son absolutamente terribles”, escribió Brown en un comunicado.

En imágenes tomadas por la policía ucraniana se ve una zona llena de escombros y varios rescatistas transportando cuerpos.

El bombardeo destruyó una tienda y una cafetería en momentos en que se encontraban allí unas sesenta personas para a asistir a una ceremonia fúnebre:

“Los habitantes en la cafetería estaban reunidos para una ceremonia de recuerdo para un aldeano fallecido”, dijo el ministro. “Entre cinco a siete personas podrían estar bajo los escombros”.

El ministro ucraniano de Defensa, Rustem Umerov, afirmó que el bombardeo es una prueba de que Ucrania necesita más defensas antiaéreas “para protegerse del terrorismo”. Estamos discutiendo esto con nuestros socios”, dijo.

Las fuerzas rusas capturaron extensos territorios de la región de Járkov en los primeros días de su invasión, iniciada en febrero de 2022. Desde entonces, las fuerzas ucranianas recuperaron gran parte del territorio fronterizo durante una ofensiva lanzado a finales del año pasado, pero la capital regional, que también se llama Járkov, sigue siendo objeto de bombardeos frecuentes.