Tras permanecer prófugo en una causa por abuso sexual, el pastor evangélico Hugo Caupolican Castro Rojas fue localizado en una clínica de Mendoza donde estaba internado con un cuadro de coronavirus. Por el momento, se encuentra con custodia policial hasta su recuperación.

Los casos de abuso sexual que se le imputan al pastor del Templo de los Milagros Iglesia Biblia Abierta de San Isidro habrían ocurrido en 2019.

“Los sábados y domingos en horarios previos a la celebración del culto, el imputado Castro Rojas en su carácter de pastor del Templo realizó en reiteradas oportunidades tocamientos con sus manos en los pechos de una de las víctimas, menor de edad, aprovechando su autoridad en la comunidad religiosa, hechos que fueron reiterados”, según consta en la causa que investiga la UFI temática de Violencia de Género de San Isidro, a cargo del fiscal Marcelo Fuenzalida.

De acuerdo al expediente judicial, “el mismo pastor evangélico es acusado de abusar a más de 20 mujeres durante 60 años, de acuerdo a testimonios tomados a asistentes de la iglesia”, en base a la declaración de testigos, en el marco de la investigación.

Los testimonios de las numerosas víctimas todas menores señalan puntos de coincidencia entre los abusos. Los patrones de los abusos se repiten: chicas entre los 10 y 14 años, manoseo a sus partes íntimas, el vínculo de confianza que generaba el guía espiritual con las familias de las chicas para acceder a ellas y el temor de estas para contarlo.

En ese marco, el fiscal había solicitado la detención de Castro Rojas y el allanamiento de la sede religiosa, lo que recibió el aval de un juez. Sin embargo, cuando la Policía llegó al sitio el hombre había desaparecido y ya no frecuentaba los lugares habituales, por lo que se lo declaró prófugo de la Justicia.

Tras investigaciones e inteligencia criminal, se estableció que el pastor se encontraba internado por coronavirus en la Clínica Amano, de la localidad mendocina de Godoy Cruz. Los investigadores mantuvieron comunicación telefónica con la Unidad Investigativa de Godoy Cruz, quien certificó que se trataba del prófugo buscado.

Inmediatamente, y tras el pedido del fiscal Fuenzalida, la Policía de Mendoza decidió poner custodia en la clínica hasta tanto se recupere el acusado y pueda ser extraditado a la provincia de Buenos Aires.