El ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, criticó este martes al jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, por haber viajado a la Ciudad de Rosario a reunirse con el intendente Pablo Javkin, en medio de la ola de violencia narco.
"No sirve el caranchismo que han demostrado muchos candidatos que van allá y ponen la cara", afirmó en declaraciones a la prensa en la puerta del Ministerio.
El mandatario porteño viajó el sábado en medio de la conmoción por las amenazas contra Lionel Messi y aprovechó para difundir una lista de propuestas para combatir la delicada situación, incluyendo mayor presencia de Gendarmería en la ciudad.
El lunes, Rodríguez Larreta sumó más críticas al Gobierno nacional por la violencia narco en Rosario: "Para qué tienen fuerzas nacionales, si no es para esto". Y pidió que lleven a las Fuerzas Armadas a los límites "para que sellen las fronteras" y de esta manera "liberar a gendarmes para que estén en las zonas calientes por la droga".
Además, cuestionó al ministro Fernández por su polémica frase "ganaron los narcos", que fue pronunciada después del ataque con 14 balas que atravesaron las persianas del supermercado Unico, propiedad del suegro de Messi. "Lo vi a Larreta con el intendente (Javkin). Los invito a que vayan y busquen la foto de esa reunión. En la mesa está el mapa del delito, es un tema absolutamente reservado para quienes están estudiando la tarea. Qué puede saber Larreta", agregó.
Al ser consultado por los incidentes en el barrio donde fue asesinado Máximo Jerez, un niño de 12 años, Fernández respondió: "Lo que se ve es una cosa muy gráfica, son situaciones que no se pueden sostener mas, tenemos que ir con el cuchillo al hueso".
Además, señaló que durante los últimos días fueron detenidas 12 personas que estaban presas. "Conforme a la ley estaban detenidos, ergo alguien los dejo salir, esas cosas tenemos que seguir profundizando", agregó.
El ministro de Seguridad sostuvo que si bien los vecinos marcan los lugares donde saben que se está vendiendo droga, existe una "complicación" para la Policía que debe actuar de una forma organizada.
"La Policía, con 3.500 efectivos que hacemos trabajo con presencia en los barrios y muy fuerte por debajo con la inteligencia criminal, no puede entrar a una casa porque sabe que tienen droga, necesita un sostén que lo hace la inteligencia", detalló.
Fernández insistió en que el problema lleva muchos años, volvió a poner como ejemplo el ataque en 2013 a la casa del entonces gobernador Antonio Bonfatti.
"Se dice que hay una connivencia de muchas partes de la economía, la sociedad y del trabajo santafesino en estas cosas. Vamos a seguir profundizando nuestra tarea e iremos deteniendo a aquellos que correspondan, como a la familia Cantero, la familia Alvarado, o hace 15 días la familia Funes, son íconos que producen esa tarea y que venden y además generan no solo la venta del estupefaciente, sino la extorsión y lo mafioso que se exhibe en el propio Rosario donde no se puede vivir tranquilo", sentenció.
