Boca Juniors y Racing empataron 0-0 en La Bombonera en la ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores. Durante el trámite del partido, el Xeneize fue superior tanto en el andar del juego como en cantidad de chances de peligro, pero no fue efectivo de cara al arco. La Academia consiguió el objetivo y rescató un punto importante que puede hacer valer en la vuelta.

Las chances de peligro fueron, en su mayoría, para Boca. El equipo de Almirón se queda con un sabor amargo con este resultado.

Queda todo abierto y se definirá el próximo miércoles en la cancha de Racing.

En el primer tiempo, Boca tuvo mayor predominio con el poder de fuego brindado por Edinson Cavani, pero la lucidez de Gabriel Arias impidió el desnivel del resultado en el comienzo. Los dirigidos por Fernando Gago sufrieron el inicio y demoraron más de 20 minutos en acomodarse a un trámite adverso que finalizó sin goles en el acto de apertura.

Además, los primeros 45 minutos se jugaron en un ambiente enrarecido luego del hostil recibimiento que le dieron los hinchas a Agustín Almendra en la previa del partido. El refuerzo de Racing en este mercado volvió a la Bombonera después de su paso reciente por el Xeneize y padeció la reprobación de los fanáticos en medio de la entrada en calor. Luego, no bien pasados tres minutos del encuentro, se dio la primera polémica en la cancha: Valentín Barco apuró la ejecución de un tiro de esquina sobre el costado izquierdo, que terminaba en gol de Edinson Cavani, pero el árbitro Wilton Sampaio anuló el centro en la previa al testazo. Esto motivó la queja airada en los dos equipos frente a la decisión del juez. Además, el primer amonestado fue Marcos Rojo. El defensor elevó el codo contra el rostro de Maximiliano Romero y se llevó la cartulina de regalo. 

Tras esto, Boca afrontó el partido como si se tratara de una final anticipada, dejando todo en la cancha para recuperar la tenencia de la pelota y aprovechar que su rival se había “apichonado” en el terreno de juego. Los minutos posteriores, la Academia intentó bajar la velocidad del Xeneize, pero no lo logró, y el encuentro llegó al entretiempo con una igualada sin goles.

El segundo tiempo comenzó con Fernando Gago distinguiéndose de Almirón y realizando un cambio con ingreso de Gastón Martirena en lugar de Tobías Rubio. El Xeneize por otro lado, incorporó los cambios a medio camino, pero le costó adaptarse. En este tramo del partido, una noticia golpeó fuerte a Boca: Valentín Barco, una de sus figuras, debió retirarse lesionado. Fue a los 47 minutos. El juvenil pidió el cambio luego de una acción del partido y Miguel Merentiel entró en su lugar. El Colo recibió un golpe que lo dejó en el piso, en lágrimas. Habrá que esperar a su evolución para saber si estará en condiciones para el choque de vuelta.

A partir de allí,  la salida de Ezequiel Fernández le quitó generación en la mitad de la cancha y la irrupción de los cuatro delanteros (Merentiel, Cavani, Zeballos y Janson) cortó al equipo en un 4-2-4. No obstante, el Xeneize supo mantener el control de la cancha. El encuentro se extendió hasta los 95 minutos, pero ninguno de los rivales pudo sacar ventaja y el resultado dejó abierta la llave de los cuartos de final. Ahora, la revancha será el próximo miércoles en Avellaneda.

Polémica

La primera y más grave controversia que encendió La Bombonera fue la de un gol que fue bien anulado. Fue a la salida de un tiro de esquina que Valentín Barco hizo rápido y en el área ganó Edinson Cavani. Sin embargo, el tanto fue anulado porque uno de los alcanzapelotas ubicó el balón dentro del ángulo del córner excediendo su función, que es la de alcanzar. El Colo Barco aprovechó esa picardía y luego Cavani sorprendió dentro del área, pero el árbitro Wilton Pereira Sampaio invalidó la acción ya con la pelota en el aire por la maniobra del juvenil, que fue expulsado. Esto generó la bronca de los jugadores de Boca Juniors encabezados por su capitán, Marcos Rojo, pero el juez no dio marcha atrás con su decisión, que fue la correcta porque nunca estuvo en juego el balón, por eso se repitió el tiro de esquina.

Por otro lado, en una jugada Rojo le puso el brazo derecho arriba a Maximiliano Romero, que se tomó la cara y se cayó al piso. El referí amonestó al ex defensor de la selección argentina y esto generó la bronca de los jugadores de Racing que pidieron la expulsión del zaguero.

A partir de ese momento los jugadores de la Academia le reclamaron al juez todas las pelotas divididas en las que alguno de sus compañeros terminó en el piso o que consideraron que hubo alguna acción fuerte.