A tres días del balotaje en el cual se decidirá quién será el Presidente de la Nación durante los próximos cuatro años, Sergio Massa, actual ministro de Economía, y candidato presidencial de Unión por la Patria cerró su campaña en el patio interno del Colegio Carlos Pellegrini, en el centro de la Ciudad de Buenos Aires frente a cientos de jóvenes.

En un acto atípico, sin dirigencia política, sin gremios ni banderas, el ministro de Economía optó por lanzarse a captar al voto joven, campo que La Libertad Avanza había marcado fuerte, y al discurso de la educación, en un formato de “cercanía” que ya había implementado para la clausura de la etapa previa a las elecciones generales de octubre.

“Descrean de las cosas que se plantean desde la destrucción y el odio”, dijo Massa dirigiéndose a los alumnos, desde un escenario en el patio de la escuela.

Allí también reivindicó la “educación pública, gratuita y de calidad”. “Que este sea nuestro cierre de campaña representa el país que queremos. Vengo a decirles que vamos a defender y mejorar la educación pública, inclusiva y gratuita”, aseguró el candidato peronista. En ambas referencias buscó contrastar con Milei, el candidato de La Libertad Avanza con el que disputará la presidencia de la Nación el próximo domingo.

El cierre de campaña que eligió el equipo de Unión por la Patria (UP) fue distinto a los caracterizados por el clásico de la militancia peronista, en los que se destacan la presencia de referentes del espacio y los discursos encendidos. La presencia del candidato oficialista con jóvenes del Pellegrini, donde fue recibido al grito de “Massa presidente”, se dio en el marco de una puja doble: por un lado el denominado “voto joven”, con el que el libertario le quitó una parte del electorado al peronismo; y por otro la pulseada por la educación pública. Se trata de una de las banderas con las que el oficialismo confrontó con la propuesta de los “vouchers” para el sector.

“El mayor sueño, la mayor utopía es defender la igualdad de oportunidades”, dijo Massa frente a los alumnos. Y agregó: “No es cierto que uno nace condicionado al lugar donde nace”.

Poco después dijo, en clave de captar a los desencantados, principal foco de los últimos esfuerzos de campaña: “tenemos que generar todas las condiciones para tener la libertad de poder trabajar de lo que quieren; la libertad de poder tener su casa, su lote, a partir de un Estado que active política; la libertad de poder elegir en la universidad que van a estudiar sin que nadie le ponga precio a lo que ustedes van a estudiar”, en obvia alusión a las propuestas libertarias.

Y apuntó: “Si me dan la responsabilidad de gobernar desde el 10 de diciembre les pido que toda esta energía, esta pasión, la pongamos en transformar definidamente la Argentina”.

Y completó: “El desafío más importante que tenemos, y tengo yo personalmente, es que frente a tanta anti política los argentinos vuelvan a creer."